Brotes & Germinados/Sprouts & Germinated



En los últimos años, el trabajo de investigación de muchos profesionales de la restauración, y en cierto modo la globalización, han conseguido que la gastronomía haya ganado muchos enteros. 
Se han recuperado productos olvidados, frutas y cereales que estaban literalmente al borde de la extinción por su poca salida comercial o rescatado materias primas que solo consumían las gentes más humildes, para convertirlas hoy en verdaderas joyas gastronómicas. 
En poco tiempo, nuestros ojos se han acostumbrado a los matices de las frutas exóticas, de las verduras orientales, de productos venidos de otras latitudes, de la aparición de nuevas variedades de frutas híbridas.
Pese a todo, existen ingredientes dentro del panorama gastronómico mundial que, al contrario que en otros culturas, no son habituales en nuestras cocinas, éste es el caso de los brotes y germinados de semillasUna tendencia que va tomando fuerza gracias a sus cualidades nutritivas, vitamínicas, hipocalóricas y palatales, y que quiero dedicarles aquí el protagonismo que merecen, dado que son pequeñas hierbas al fin y al cabo.
Citando a Valérie Cupillard, autora de varios libros de cocina y ganadora del premio Gourmand World Cookbook por “Semillas germinadas y brotes tiernos”, (por cierto, un fantástico libro): “Incorporar brotes al plato da un nuevo aire a la alimentación cotidiana. Le dan un toque alegre y lúdico a los menús. Para el paladar, el primer encuentro con el germinado suele ser innovador y sorprendente y alegran la vista. Encierran en sí una energía primaveral, de nacimiento, de renovación, son alimentos vivos”.
Según dicen varios reputados nutricionistas, los  brotes y germinados tienen un alto poder antioxidante y contribuyen a la lucha contra el envejecimiento, las enfermedades vasculares o el Alzheimer. También, tienen un alto contenido en clorofila, sustancia que absorbe la sangre, son remineralizantes y ayudan a eliminar toxinas. Al ser comida viva, si se consume en crudo, no hay pérdida vitamínica. 
Cada semilla aporta distintas vitaminas y proteínas. Los brotes de soja, las judías mungo, las pipas de girasol, el sésamo, la alfalfa y el brécol aportan proteínas vegetales. 
El fenugreco, las lentejas, los berros, las espinacas, el hinojo, el sésamo o el brócoli aportan hierro. Las lentejas, el lino, las espinacas, el alforfón y el sésamo son ricos en magnesio.
El calcio lo aportan las lentejas coral, los berros, la quínoa y los azukis, unas habichuelas redondas y pequeñas de color malva y origen japonés.
El brote de trigo es generoso en vitamina B, la zanahoria, la col y el hinojo en fósforo. La alfalfa es el antioxidante por excelencia.
La rúcula es rica en vitamina C.
Pueden dar un toque de distinción acompañando carnes, a unas verduras salteadas, a un pescado, a sopas, cremas de otoño o emulsiones en crudo. En revueltos, en postres, yogures o incluso en zumos, además del uso más popular, como ingrediente principal en las ensaladas o aportando una nota de textura y cromatismo en el montaje y decoración de platos.
El cultivo de los germinados es relativamente sencillo y se pueden hacer incluso en nuestra cocina. Basta con poner a remojo las semillas de 8 a 12 horas. Tras ello se sacan del agua y se colocan en un germinador, (los hay de diversos tipos y precios), en un lugar cálido y con poco contacto con la luz.

Se deben tener ciertas precauciones como asegurarse que el germinador deje escurrir bien el agua y, dos veces al día enjuagar bien las semillas con agua y escurrirlas muy bien (para evitar que salgan hongos.

Tras unos pocos días y cuando nuestros brotes tengan una altura de unos 2 cm de alto, pondremos el recipiente en un lugar más luminoso para que vayan tomando un color más verdoso y vivo.
Una vez recolectada nuestra pequeña cosecha podremos guardarla en la nevera, procurando que no tengan humedad para que no generen moho, al menos una semana.
A la hora de utilizar estos brotes, solo habrá que lavarlos adecuadamente,  quitarles las raíces si se desea, y utilizarlos como más apetezca.

Os imaginas los aromas y sabores de algunas de nuestras hierbas y especias, pero en su estado más primigenio, frescas y vivas?