Pétalos Secos de Rosa/Dried Rose Petals
En la antigüedad, las rosas se consideraban un símbolo de
pureza, aparecían en los mitos, eran apreciadas por los gobernantes y
utilizadas en grandes fiestas, celebraciones y ceremonias como las bodas, pero también en los
funerales.
Ocupaban un lugar especial en la mitología griega, ya que, según
una antigua leyenda, las rosas fueron creadas por Afrodita, la diosa del amor,
nacieron de sus lágrimas y de la sangre de su amante Adonis.
Cleopatra VII, probablemente inspirada por el origen mítico
de las rosas, utilizaba sus pétalos en sus apariciones públicas. Quería ser
recordada como una diosa que olía a rosas.
Cuenta la leyenda que la emperatriz china más famosa, Wu
Tsê-tʻien, conocida
por su belleza e inteligencia, solía bañarse en rosas todos los días. También
se convirtió en la única mujer emperadora que gobernó China en el año 690.
El médico y científico árabe Ibn Sina, (980 – 1037), utilizaba infusiones de rosa para tratar
afecciones de la piel y la mezclaba con miel para usarla como jarabe para la
tos.
Persas, griegos y romanos eran aficionados a cocinar con
rosas, las utilizaban para infusionar aceites y aguas medicinales, o para
añadir dulzor natural, también utilizaban pétalos de rosa para decorar sus
mesas de banquetes. El poeta Horacio hace referencia a ello en una de sus odas:
"Oh, ordena ahora que se traigan los vinos / y los perfumes, y las flores
demasiado breves / de la rosa mientras las circunstancias lo permitan…".
Ya por la Edad Media, en Oriente Próximo, se utilizaban para tratar
la depresión y la ansiedad y para mejorar la circulación.
Hoy en día, gracias a la investigación médica moderna que ha evidenciado estas propiedades en el aceite de rosa, se utiliza en aromaterapia
para tratar la depresión, la ansiedad y mucho más.
Contienen polifenoles, un tipo de antioxidantes, los cuales
se ha demostrado que favorecen la circulación, reduciendo el riesgo de
cardiopatías.
Su alto contenido en vitamina C y ácidos frutales, así como
en betacarotenos, pectina y taninos, refuerza el sistema inmunitario del
organismo y constituye un excelente tónico que aporta energía y vitalidad, además de fortalecer las paredes arteriales.
Se les atribuyen también propiedades calmantes y antiestrés.
El embriagador aroma de los pétalos de rosa añade un
delicado perfume a las mezclas de especias de Oriente Medio como Ras El Hanout
y Advieh.
Los pétalos de rosa también aportan un exótico sabor floral
a sopas y ensaladas, postres, salsas y cócteles, o para aromatizar tés,
azúcares, zumos, mermeladas, etc.
Algunos ejemplos de sus usos pueden ser:
Té de pétalos de rosa secos: Remojar los pétalos de
rosa secos en agua hirviendo durante unos 5 minutos. Colar y endulzar con miel
si se desea. Este té es calmante, aromático y lleno de propiedades
antioxidantes.
Mermelada de pétalos de rosa: Mezclar pétalos de rosa
secos con azúcar y agua. Hervir hasta que el azúcar se disuelva por completo y
los pétalos estén blandos. Añadir un chorrito de zumo de limón y dejar enfriar.
Utilizar para untar tostadas o como cobertura de postres.
Guarnición floral para ensaladas: Añadir pétalos de
rosa secos a las ensaladas para darles un toque decorativo y un sutil sabor
floral.
Azúcar de pétalos de rosa: Mezclar pétalos de rosa
secos con azúcar granulado y guardarlos en un tarro. Utilizar este azúcar en
repostería para darle un toque floral.
Almacenar en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar
directa, el calor y la humedad.
* En general, el uso de pétalos de rosa secos es seguro. Sin
embargo, si se tienen alergias o sensibilidad a las rosas u otras plantas de la
familia Rosaceae, es recomendable tener precaución o consultar antes de
su uso.