Quandong
El Quandong, Santalum
acuminatum, es el nombre común de un pequeño árbol del desierto de hasta 4
metros de altura, con corteza áspera y oscura, y hojas colgantes, alargadas y
de color verde pálido.
Este árbol tiene una amplia distribución
natural en todo el sur de Australia, desde zonas áridas y desérticas hasta
regiones costeras, pero al ser hemiparásito, es decir, que realiza la fotosíntesis,
pero también se alimenta de otra planta, su cultivo es difícil y en gran medida
experimental.
En este país, donde también se conoce
como melocotón salvaje o del desierto, los aborígenes lo utilizan desde tiempos
ancestrales como una importante fuente de alimento nativo. Entre los miembros
masculinos del pueblo Pitjantjatjara de Australia Central, los Quandong se
consideraban un sustituto adecuado de la carne
El fruto, de color escarlata brillante,
mide unos 2 cm de diámetro y contiene una nuez o pepita grande, a veces solo
ligeramente más pequeña que la fruta.
Esta pepita también es muy nutritiva, aunque
los indígenas australianos solían usarla principalmente con fines medicinales,
lo mismo que las raíces.
La madera de estos árboles de crecimiento
lento era muy apreciada para la fabricación de cuencos tradicionales llamados Coolamon
o Pitti.
La fruta Quandong desempeña un papel destacado en la mitología aborigen de todas las regiones desérticas.
La nutritiva carne roja del fruto contiene
el doble de vitamina C que una naranja, tiene una extraordinaria capacidad
antioxidante, altos niveles de folato y vitamina E. Además, es una buena fuente de
magnesio, zinc y hierro.
Los Quandong son sabrosos de comer,
y su pulpa, ligeramente desecada, con su característico sabor ácido y picante,
puede utilizarse para crear alimentos dulces o salados, tales como mermeladas y
chutneys, conservas, salsas, condimentos, zumos, postres o helados.
Las semillas, conocidas como nueces de Quandong, valen para consumirse crudas, tostadas o saladas, y tienen un sabor comparable al de
la almendra, con un aroma suave, terroso y fermentado, parecido al de las
lentejas o alubias secas.
Tanto la pulpa deshidratada, como las
semillas, son apropiadas para la elaboración de condimentos o mezclas de
especias, donde su peculiar sabor aportará matices frescos y terrosos.